La nadadora capitalina, de 1,70 m de estatura y 62 kilos de
peso, combina el entrenamiento en la piscina con la rehabilitación física y
sesiones de fisioterapia. Viaja hoy junto al halterista José Mariño.
Jessica Lalama, nadadora ecuatoriana con discapacidad que se
encuentra clasificada a los Juegos Paralímpicos Londres 2012, es la abanderada
del país en estas justas deportivas que arrancarán el 29 de agosto en la
capital británica, en donde alrededor de 4000 deportistas discapacitados
representarán a 150 naciones en 470 eventos. La deportista forma parte del
programa que el Ministerio del Deporte, con una inversión de $ 635.464 puso en
práctica para la preparación de un grupo de 14 deportistas con discapacidad,
con miras a su participación en los Juegos Paralímpicos. Jessica Lalama fue la
única deportista ecuatoriana que logró su clasificación a Londres con marca A,
en tanto José Mariño, quien participa por tercera oportunidad en estas
competencias, recibió la invitación del Comité Organizador. La nadadora
ecuatoriana, de 18 años, con un coeficiente intelectual del 49%, practica esta
actividad en forma continua y planificada desde alrededor de un lustro. Lo hace
bajo las órdenes de sus entrenadores, Marco Dávila y Juan Carlos Araujo. Su
clasificación la obtuvo en el Open Fadesir de Argentina, con un tiempo de
2.41.59 para cubrir los 200 metros libres, bajando la marca base exigida por el
Comité Paralímpico Internacional (2.42.45). En las piletas del Centro Activo
del Deporte 1 en la capital; en la piscina olímpica de Guayaquil y en la
Academia Naval en Quito, ha realizado los últimos entrenamientos, previos a su
desplazamiento previsto para hoy a las 12:00. “Desde hace cuatro años estoy
entrenando, hago 8 piscinas en la mañana y 8 en la tarde, dos entrenamientos
diarios”, manifestó la deportista. En Guayaquil cumplió parte de la
planificación en la piscina olímpica. “Me preparé bastante allá, terminaba
cansada y después regresaba a la federación (Guayas) para descansar, almorzar y
volver a los entrenamientos”. Un equipo de trabajo, integrado por una
fisioterapista, una psicóloga, un entrenador y un preparador físico, ha controlado los entrenamientos de la
seleccionada nacional, así como el uso de medicinas, vitaminas, alimentación y
transporte, en jornadas diarias de dos horas que las iniciaba desde las 07:30
hasta las 09:30. “Es la primera vez que viajo a Londres y trataré de ganar
todas las medallas posibles, le doy gracias al Ministerio del Deporte, pero
sobre todo a mis padres que me apoyan bastante”.
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