Es casi ciego pero puede decirle a todo el mundo que tener
un 90% de miopía no es impedimento para convertirse en el mejor, en un deporte
que requiere una vista de halcón.
El surcoreano Im Dong-Hyun logró en tiro con arco el primer
récord mundial registrado en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, con un
puntaje de 699 en 72 flechazos durante las pruebas de clasificación que se
realizan en el mítico campo de cricket de Lord's. Im Dong Hyun, también
poseedor de la anterior plusmarca mundial, desde mayo de 2012, con 696, es
considerado ciego desde el punto de vista legal, dado que sólo tiene el 10% de
visión con su ojo izquierdo y el 20% con el derecho. Para explicar cómo puede
ver los colores del blanco, ubicado a 70 metros de distancia, el arquero
asiático explicó recientemente que para él es como si observara un cuadro
impresionista que hubiera sido empapado por el agua. "No uso bastón ni
tengo un perro lazarillo", comentó el surcoreano, a quien no le gusta
hablar de los problemas que tiene en su vista. Pese a ello, explicó en una
reciente entrevista con el The Daily Telegraph que, cuando observa el blanco,
todo lo que puede hacer es "tratar de distinguir entre los diferentes colores".
"Si yo no pudiera ver los colores, eso sería un problema". Su técnica
sin duda le da buen resultado, ya que ganó la medalla de oro en Atenas 2004 y
en Beijing 2008, y obtuvo varias preseas doradas y de plata en campeonatos
mundiales de la disciplina. Por eso Im Dong-Hyun decide seguir confiando en sus
sensaciones y no utilizar anteojos o realizar alguna cirugía ocular. "He
practicado con anteojos, pero me hace sentir menos cómodo cuando disparo".
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