Así fue para Juan De la Fuente la regata final que confirmó
el tercer puesto del bote 470 de la Argentina. "Es una alegría y un honor
llevar esta medalla para la Argentina".
La segunda medalla de la delegación argentina en Londres
2012 llegó desde el agua, en una actividad que le dio alegrías ininterrumpidas
al país desde 1996. Juan De la Fuente y Lucas Calabrese, a bordo del bote 470,
consiguieron el bronce tras superar a la dupla italiana en la medal race.
"La última regata fue más fácil de lo esperado", confesó De la
Fuente. Para el navegante bonaerense esta fue la segunda presea tras el bronce
obtenido junto a Javier Conte en Sydney 2000. "Es una alegría y un gran
honor haberle dado a mi país dos medallas olímpicas. Ya tengo dos, pero en una
de esas voy por más". Argentina debía vencer a los italianos Gabrio
Zandona y Piestro Zucchett, únicos contendientes en el camino al bronce.
Finalmente, la dupla albiceleste fue tercera en la regata definitoria. "Esperábamos
que Italia atacara más, pero no pasó. Fue más fácil de lo esperado. Por suerte,
nos subimos al podio". Si De la Fuente representa la experiencia,
Calabrese -de 24 años- es el futuro: con sólo 24 años, se subió al podio en su
primera experiencia olímpica. "Fue muy duro tumbar el barco en la segunda
regata. Hubo que remontarla de abajo pero después, salió todo bien. Esto es increíble".
De esta forma, la representación argentina de vela en los Juegos Olímpicos suma
su novena medalla: en Londres 1948, plata para el bote de 6 metros; en Roma
1960, plata para la clase Dragon; en Atlanta 96, plata de Carlos Espinola en
clase Mistral; en Sydney 2000, plata para Espínola en clase Mistral, bronce
para Conte y De la Fuente en 470 y bronce para Serena Amato en Europe; en
Atenas 2004, bronce para Espínola y Santiago Lange en Tornado; y en Beijing
2008, otro bronce para la dupla Espínola-Lange.
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