Los organizadores de los Juegos Olímpicos de Londres
anunciaron ayer que recortarán escenas de la ceremonia de inauguración, el día
27, para asegurar que termine con puntualidad y que los espectadores puedan
regresar en transporte público.
El Comité Organizador (LOCOG) informó de que se cancela un
número de acrobacias con motocicleta para que la ceremonia, que comenzará a las
20.00 GMT, concluya antes de las 23.30 GMT, a tiempo para que los espectadores
puedan volver a casa en metro o autobús. La ceremonia, diseñada por el cineasta
británico Daniel Boyle y de la que han trascendido pocos detalles, tendrá como
escenario un paisaje de la campiña inglesa y cuenta con un presupuesto de 27
millones de libras (33 millones de euros), menos de la mitad de los 80 millones
de euros que costó la ceremonia de Pekín 2008. A pesar de la supresión de una
parte del espectáculo, un portavoz del LOCOG aseguró que "los contratos
firmados se pagarán por completo" y que los protagonistas del número
cancelado continuarán apareciendo en los créditos de la ceremonia. "Es
normal que esto ocurra, ya sea en ceremonias o en espectáculos teatrales. Se
están ensayando todas las secciones y transiciones para ajustarse al máximo al
horario previsto". El Estadio Olímpico de Stratford, al este de Londres,
reunirá a 62.000 espectadores para una ceremonia con una audiencia televisiva
potencial de mil millones de personas en todo el planeta. En el Reino Unido,
retransmitirá el espectáculo la cadena pública BBC, que ayer anunció un acuerdo
con el Comité Olímpico Internacional (COI) por el que tendrá los derechos
televisivos de los Juegos Olímpicos de verano e invierno hasta 2020. Una
campana de 23 toneladas marcará el inicio de una ceremonia que contendrá además
referencias a la obra del dramaturgo británico William Shakespeare y que
concluirá con una actuación del ex Beatle Paul McCartney, interpretando el tema
"Hey Jude".
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