El ciclista británico Chris Hoy, una verdadera leyenda en la
pista por su riquísimo palmarés en las pruebas de velocidad, buscará extender
este prodigio sobre la bicicleta en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Chris Hoy
El escocés volador, de 36 años, posee cuatro medallas de oro
olímpicas, de las cuales tres conseguidas en Beijing 2008 luego de imponerse en
velocidad individual, velocidad por equipos y keirin. El otro metal dorado lo
obtuvo al proclamarse campeón del kilómetro en Atenas 2004. Nombrado Caballero
del Imperio Británico, "Sir" Hoy también archiva un metal de plata
del sprint por equipos conquistada en Sídney 2000, a lo que se suma una
veintena de medallas de varios colores ganadas en Mundiales desde 1999. Semejante
récord lo convierte en el capo del poderoso equipo británico, favorito para
dominar la pista londinense. De 1,85 metros de estatura y 92 Kg. de peso, el
ciclista de Edimburgo asegura que todo su éxito obedece a un gran esfuerzo.
"Siento que mi carrera estuvo cortada en dos. Por momentos pensaba que
estaba perdido y sin dirección". "Tuve que hacer un esfuerzo enorme
para sacar lo mejor de mí y tener esta carrera". Amante de las dos ruedas
desde que se subió a una bicicleta para entrenarse a los siete años, en la
época juvenil repartió su tiempo libre entre el rugby y el remo, y luego se
lanzó de lleno al ciclismo en pista a los 20 años. Tres años después se colgó
su primer metal en el Mundial de 1999, con plata en velocidad por equipos.
En Sydney 2000 obtuvo el segundo lugar en la misma
especialidad, para por fin lograr el oro en el Mundial 2002, en las pruebas de
velocidad por equipos y el kilómetro, que también ganó en Atenas 2004. En total
tiene 11 medallas de oro en lides mundiales y el pasado mes de abril dio a Gran
Bretaña su sexto título en el Mundial de Australia 2012.
"El objetivo siempre es ganar, pero primero había que
clasificarse (para Londres 2012), ahora la meta es la medalla de oro". Sin
duda el rey del sprint, el ciclista más veloz del planeta tiene el récord
mundial de 500 metros con salida lanzada (marzo de 2007). En el Mundial de
Manchester 2008, entró en la leyenda del ciclismo en pista al ganar el oro en
el sprint individual, que se sumó a sus títulos anteriores de velocidad por
equipos, kilómetro y keirin. Con su velocidad y calidad en plena madurez, no
hay duda de que el británico va a por más ante su público en las competiciones
que tendrán lugar del 2 al 7 de agosto.
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