Gustavo Osorio, entrenador del lanzador de jabalina Braian
Toledo, auguró esa distancia para su pupilo en el Nacional de Juveniles que se
disputará en el CeNARD.
Braian Toledo
Braian Toledo, pareciera, no tener límites. Cada lanzamiento
dispara todo tipo de ilusiones para el futuro de este joven de Marcos Paz que
sueña con su jabalina “viajando al infinito”. Y en ese camino, Gustavo Osorio
–su entrenador- es puro optimismo. “Este sábado, en el Nacional de Juveniles,
va a tirar más de 80 metros”. Este certamen, que se disputará en el Centro
Nacional de Alto Rendimiento Deportivo, será la despedida como juvenil en
Argentina y su última competencia en el país antes de los tres torneos
importantes que lo esperan en este trimestre: el Iberoamericano de mayores de
Venezuela (en junio, en Barquisimeto), el Mundial Juvenil de España (en julio,
en Barcelona) y los Juegos Olímpicos de Londres (en agosto). “El sábado Braian
va a lanzar más de 80 metros y en los próximos torneos superará esa marca”. Y
ante esta muestra de confianza, Toledo no se quedó callado: “Si él lo dice...
Lo importante para mí es estar concentrado en cada entrenamiento y después sé
que los resultados se van a ir dando solos”. La distancia que auguró Osorio no
pasa inadvertida, ya que un lanzamiento de 82,50 metros le alcanzaría a Toledo
para meterse en la final olímpica, algo impensado para un joven de apenas 18
años. No obstante, el propio Braian se encargó de dejar en claro que el
objetivo, por ahora, es otro: “Hay que tener los pies sobre la tierra”. De
cualquier manera, la ilusión existe y se alimenta a fuerza de actuaciones
descollantes: “Me entreno todos los días para estar en la final de los dos
torneos, pero no me desespera estar pensando en las marcas. Estoy muy orgulloso
de haber clasificado a los Juegos y ahora seguiré haciendo las cosas con el
mismo esfuerzo y la misma alegría para poder superarme”.
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