Rocío Comba
Con una marca de 71,16 metros, la lanzadora de martillo
Dahlgren se subió a lo más alto del podio que completaron la canadiense Sultana
Frizell (68,83) y la colombiana Eli Johana Moreno Valencia (68,38). “En la
entrada en calor ya venía media descoordinada. Por suerte pude corregir algunos
pequeños detalles de la técnica durante la competencia y terminé conforme.
Siempre busco quedar arriba de los 70 metros. Tomo como una experiencia positiva
para seguir creciendo el hecho de no haberme sentido cómoda al comienzo y haber
tenido la capacidad de recuperarme”, la dueña del record sudamericano (73,74). Por
su parte, el lanzador de bala Lauro se impuso en su disciplina con 20,32
metros. Segundo quedó el también argentino Nicolás Martina (17,95) y tercero el
boliviano Aldo González (17,25). “Estoy contento por las marcas que logré hoy,
porque estamos en una etapa de la preparación en la que todavía no estoy en el pico
de mi rendimiento. Ahora tengo que seguir entrenándome duro. Mis expectativas
son muy buenas, esperamos meternos en la final olímpica, sería muy bueno para
nosotros y para el atletismo argentino. Las medallas sabemos que están todavía
un escalón más lejos”. “Estoy mejor para Londres de lo que llegué a Beijing
hace cuatro años. Hoy tengo mucha más experiencia. El sexto puesto en el
Mundial Indoor de Estambul me dio mucha confianza, fue un empujón anímico importante,
aunque también una presión, porque ahora tengo que repetir una actuación así en
Londres. Desde entonces no he bajado de los 20 metros”, quien en el tercer
lanzamiento de hoy se dobló un dedo, lo cual le impidió completar la serie de lanzamientos
con normalidad. Otra lanzadora argentina campeona fue Comba, quien tiró 56,65
metros su disco. Fue escoltada por la brasileña Fernanda Raquel Borges (53,69)
y por la chilena Karen Pamela Gallardo (53,13). “La idea era mejorar pero no
salió. Alcanzó para ganar y hacer respetar mi lugar, marcar la jerarquía en
especial después de un año que no fue tan bueno. Demostré que estoy bien otra
vez. Me jugué todo en los primeros lanzamientos. La clasificación a Londres fue
antes de lo pensado y significó mucha alegría para mí. Estar en camino a mis
segundos Juegos marca mi crecimiento, mi madurez como atleta. Voy con una propuesta
más seria”.
Pasaje para Barcelona
Una de las grandes alegrías de la jornada la tuvo como
protagonista a la juvenil de 18 años Daniela Gómez, quien lanzó su martillo a
56,23 metros y consiguió la clasificación para el Mundial júnior de Barcelona y
para el Sudamericano de San Pablo. “Esto fue lo mejor del año, me sentí muy
cómoda. Fue importante haber comenzado con un lanzamiento de 55 metros para
tirar más relajada el resto”.
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