Al buscar estrellas para presentarse en las ceremonias de apertura y cierre de los Juegos Olímpicos de Londres, el Comité Organizador cometió un tremendo error. Los dirigentes habrían contactado algunos empresarios en búsqueda de Keith Moon, baterista de la banda The Who, fallecido en 1978 por sobredosis accidental de medicamentos.
Bill Curbishley, empresario de la banda, fue cuestionado por los organizadores del evento para evaluar la propuesta de contratar al baterista, conocido por su comportamiento extremo y autodestructivo. Curbishley dijo que envió un correo electrónico diciendo que “Keith Moon ahora reside en el crematorio Green Golders, llevando adelante la frase himno del The Who: “Espero morir antes que ser viejo”. El empresario también provocó a los dirigentes, afirmando que “si tienen una mesa redonda, algunos vasos y velas, podrían contactarlo”. La organización trabaja para definir los participantes de las ceremonias de apertura y cierre del evento. La inauguración, por ejemplo, ya tiene confirmada la presencia de la reina de Inglaterra, Isabel II, y debe contar con la presentación de los Rolling Stones. El cierre de los Olímpicos tendrá una celebración titulada “Symphony of Rock”, en la cual participarían varios músicos. Recientemente, otra famosa banda británica rechazó la invitación para participar del evento, los Sex Pistols.
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